miércoles, 25 de noviembre de 2009

Sabino Arana y el nuevo obispo de San Sebastián

El clero y la jerarquía eclesiástica vasca –antes de la guerra civil y después de 1975, y calladamente durante el franquismo— se han comportado como factores de reproducción del nacionalismo
 

"Interiorizaron esa frase tan grotesca pero descriptiva de Josu Erkoreca, portavoz del PNV, según el cual, "no es lo mismo pastorear ovejas latzas que ovejas burgalesas". Por supuesto, los vascos seríamos latzas, especiales, distintas (¡autóctonas!) y requeriríamos un "pastor" igualmente diferente. Como se ve, un argumento basto".


Podría desgranar muchas más citas de las obras de Sabino Arana que demuestran que su concepción del nacionalismo era mesiánica de tal manera que el buen vasco era sólo el buen católico, y así  ambas condiciones se convertían en  indisociables. De ahí la afinidad ideológica con la Iglesia local que, desde finales del siglo XIX se encargó, frente a la revolución industrial y las grandes migraciones internas en España,  de conservar las costumbres más ancestrales, el idioma vasco, la endogamia y, al final, la desconfianza ante "el diferente", el "otro". ETA se constituyó un 31 de julio de 1959 en Loyola. Jamás la banda terrorista atentó contra un prelado o contra un sacerdote; siempre respetó –salvo episodios violentos contra el Opus Dei, muy contados—una especie de exención hacia la clerecía. (EL CONFIDENCIAL) 
  
EL PAÍS.- La posición del Gobierno español es delicada y cada vez más incómoda. No bastan las buenas intenciones ni que el ministro Moratinos reconozca "la legítima posición" del pueblo saharaui. Si España, como la ONU, no reconoce que el Sáhara Occidental sea marroquí, no se comprende la facilidad con que ha aceptado esas razones administrativas alegadas por Marruecos al tiempo que rechaza las de la activista saharaui para intentar viajar de nuevo a El Aaiún. 
  
  
EL MUNDO.- Montilla y sus consellers intentan regresar con las naves del enemigo, pero sin arriesgar ni siquiera el sueldo. En la historia de Cataluña hubo alzamientos, alborotos y revueltas. Intentaron la instauración de una república bajo la protección del rey de Francia. Quevedo, pluma del conde-duque, devorado por el odio a los catalanes, los retrata como desleales y ladrones, en su caos de privilegios. Aquellos peleaban, éstos no pierden el tiempo luchando contra el Estado, están introducidos en él, conspiran desde dentro, amparados por la Constitución, que apuñalan con vileza. 
  
  
  
  
  
  
  
  
Opinión. El Confidencial 
Sabino Arana y el nuevo obispo de San Sebastián 
J. A. Zarzalejos 
  
El clero y la jerarquía eclesiástica vasca –antes de la guerra civil y después de 1975, y calladamente durante el franquismo— se han comportado como factores de reproducción del nacionalismo en el País Vasco, de tal manera que el entendimiento tácito entre obispos y partidos nacionalistas ha sido una constante, especialmente en estas tres últimas décadas. No lo afirmo yo, sino los sociólogos (Pérez Agote) y ensayistas (Jon Juaristi y Patxo Unzueta) expertos en esta materia. Desde el llamado caso Añoveros (obispo de Bilbao que estuvo a punto de ser expulsado de España por Franco en febrero de 1974 a cuenta de una carta pastoral en la que el prelado reclamaba el reconocimiento de la identidad cultural y lingüística vasca), las diócesis de Bilbao, San Sebastián y Vitoria han estado acaparadas por prelados próximos al nacionalismo o subordinados a su hegemonía social y política. Porque interiorizaron esa frase tan grotesca pero descriptiva de Josu Erkoreca, portavoz del PNV, según el cual, "no es lo mismo pastorear ovejas latzas que ovejas burgalesas". Por supuesto, los vascos seríamoslatzas, especiales, distintas (¡autóctonas!) y requeriríamos un "pastor" igualmente diferente. Como se ve, un argumento basto. 
  
Los más destacados en esta afinidad nacionalista han sido los ya eméritos José María Setién y Juan María Uriarte, ambos al frente de la diócesis de San Sebastián, pero el antecesor de Ricardo Blázquez en Bilbao, el fallecido Luis María Larrea Legarreta (1979-1995), también sintonizaba en la onda peneuvista más tradicional. Fue desde la llegada de Blázquez a Bilbao –recibido con el despectivo "un tal Blázquez" de Arzalluz, o el ofensivo "loro viejo no aprende a hablar" (euskera) de Anasagasti— cuando las cosas parecieron cambiar. Sin embargo, el liderazgo de Setién y de Uriarte se comieron el apoliticismo del obispo bilbaíno que firmó, con estos dos y el de Vitoria –Miguel Asurmendi— una carta pastoral ("Preparar la paz", de 29 de mayo de 2002) que atacaba la ilegalización de Batasuna y defendía claramente la ideología nacionalista. 
  
Aquella pastoral fue un tremendo error de los prelados vascos que hizo reaccionar a la Santa Sede que, a partir de entonces, imprimió, si bien lentamente, un giro en los nombramientos episcopales. Aunque envió a Uriarte a San Sebastián, potenció a Blázquez al que ha adosado desde 2008 a un auxiliar alejado de veleidades nacionalistas –Mario Iceta—y ahora acaba de sustituir al jubilado obispo donostiarra, Juan María Uriarte, por José Ignacio Munilla, antes en la diócesis de Palencia, nacido en la capital de Guipúzcoa, conocedor a la perfección del euskera, formado en Toledo y con experiencia pastoral en el País Vasco (fue párroco en Zumárraga). 
  
Estos cambios son convulsivos para un PNV cuyo fundador, Sabino de Arana y Goiri, era un desaforado católico que entendía teocráticamente Euskadi  ("Euskadi para Dios", escribió en uno de sus muchos arrebatos) y que dejó reflexiones como las que siguen: 
  
-         "El clérigo debe buscar sólo el Reino de Cristo. El seglar, ante todo el Reino de Cristo". 
  
-         "Mi patriotismo se fundó y cada día se funda más en mi amor a Dios, y el fin que en él persigo es de conducir a Dios a mis hermanos de raza, a mi gran familia, el pueblo vasco". 
  
-          "Muchos pueblos han recorrido con Cristo el camino del Calvario en su Historia, pero sólo un pueblo conozco que haya merecido ser insultado, como Cristo, en su propia cruz: El Pueblo Vasco". 
  
Desorientación política 
Podría desgranar muchas más citas de las obras de Sabino Arana que demuestran que su concepción del nacionalismo era mesiánica de tal manera que el buen vasco era sólo el buen católico, y así  ambas condiciones se convertían en  indisociables. De ahí la afinidad ideológica con la Iglesia local que, desde finales del siglo XIX se encargó, frente a la revolución industrial y las grandes migraciones internas en España,  de conservar las costumbres más ancestrales, el idioma vasco, la endogamia y, al final, la desconfianza ante "el diferente", el "otro". ETA se constituyó un 31 de julio de 1959 en Loyola. Jamás la banda terrorista atentó contra un prelado o contra un sacerdote; siempre respetó –salvo episodios violentos contra el Opus Dei, muy contados—una especie de exención hacia la clerecía. 
  
Por todo eso el nombramiento de José Ignacio Munilla y, antes, en 2008, de Mario Iceta, aquel como titular de San Sebastián y éste como auxiliar de Bilbao (sustituyendo al también nacionalista Carmelo Etxenagusia), ha convulsionado al nacionalismo vasco que ha tenido hasta ahora en las sedes episcopales de las tres capitales vascas a interlocutores siempre propensos a la comprensión de sus tesis y a la reproducción, sutil o explícita, del nacionalismo. Que el PNV diga ahora que va a votar la ley del aborto –contra el criterio de su propio electorado—no es una prueba de secularización ideológica sino de desorientación política en una tesitura en la que su hegemonía se pierde, además de en el Gobierno de la Comunidad, en las iglesias locales. 
  
Los nacionalistas saben que, estas nuevas designaciones no se han improvisado: se trata de prelados debidamente preparados para afrontar su tarea pastoral en un clima de hostilidad ideológica y en sociedades en las que la Iglesia se ha convertido más que en un referente espiritual en una pieza política del complejo puzle vasco. O sea, que entre los lopeces en Ajuria Enea y los munillas en las sedes episcopales, Euskadi parece emprender una senda de cambio (...) 
EL CONFIDENCIAL. 25-11-2009 
  
  
  
  
Editorial. El País 
Cómo ayudar a Haidar 
  
La situación en que se encuentra la activista saharaui Aminatou Haidar en el aeropuerto de Lanzarote, al que llegó tras ser privada de su pasaporte marroquí e impedida de entrar en El Aaiún, su ciudad natal y en la que residen su madre y dos de sus hijos, es de la entera responsabilidad del Gobierno de Marruecos. Corresponde a este Gobierno resolverla y es difícil concebir otra forma de hacerlo que no sea devolviendo el pasaporte y no impidiendo la libre entrada a su territorio a alguien que, aunque defienda ideas que no gustan a las autoridades, lo hace pacíficamente y al amparo de los códigos de derechos humanos. 
Al Gobierno español le corresponde no hacerse cómplice de un acto autoritario y arbitrario como el que ha cometido el Gobierno marroquí con Aminatou Haidar. Y no está claro que no lo haga si su actuación se limita a impedirle que intente de nuevo volver a El Aaiún, alegando que carece de pasaporte cuando esa carencia no impidió su entrada en territorio español, y a ofrecerle la posibilidad de acogerse al Estatuto del Refugiado, lo que, al margen de las buenas intenciones, haría el juego al Gobierno marroquí. La cuestión es que Haidar no desea permanecer en territorio español en contra de su voluntad, ni tampoco quiere acogerse al Estatuto del Refugiado. Y que esa situación la ha llevado a una huelga de hambre que, además de poner en riesgo su salud, agrava un problema que Marruecos ha sabido trasladar a España con una facilidad pasmosa. 
La posición del Gobierno español es delicada y cada vez más incómoda. No bastan las buenas intenciones ni que el ministro Moratinos reconozca "la legítima posición" del pueblo saharaui y se defienda de ser "pro marroquí". Son los hechos los que cuentan, y en este caso lo que se echa en falta es una actuación de la diplomacia española -todo lo prudente que se quiera, pero firme-, para requerir a Marruecos que reconsidere su actitud y no supedite los derechos fundamentales de las personas a razones administrativas como las alegadas -escribir Sáhara Occidental en lugar de Marruecos en la ficha de entrada- para impedir la vuelta de Haidar a su ciudad. Si España, como la ONU, no reconoce que el Sáhara Occidental sea marroquí, no se comprende la facilidad con que ha aceptado esas razones administrativas alegadas por Marruecos al tiempo que rechaza las de la activista saharaui para intentar viajar de nuevo a El Aaiún. 
EL PAÍS. 25-11-2009 
  
  
  
Opinión. El Mundo 
Quemar los vaixells 
Raúl del Pozo 
  
Catalanes y no catalanes se parecen en que para cada uno de ellos su país es su angustia. Los primeros llevan 100 años, o tal vez 300, amenazando con irse y nunca se van. Los otros viven con aflicción ese juego de amantes despechados, condenados a seguir juntos. Pero ¿por qué condenados? ¿Acaso el divorcio entre personas no puede ampliarse a los pueblos? Escribe Ciorán, refiriéndose a la España inacabada. «Es casi imposible hablar con un español de otra cosa que de su país, universo cerrado, provincia absoluta, fuera del mundo». Los catalanes han cogido el punto a los demás españoles, les toman el pelo. España conjugó todos los verbos con Cataluña: allanar, bombardear, conllevar y, por último, tragar. Estamos llegando al límite de la fatiga, al punto de no retorno. 
  
Montilla, al que oí en un mitin de campaña hacer el discurso más catalanista, por no decir independentista, que he escuchado, parece ahora dispuesto a romper amarras. Exige al Tribunal Constitucional que respete la legitimidad del Estatuto, que empuña como un cuchillo contra la Constitución. Saura pide que se disuelva el Constitucional. Joan Ridao, de Esquerra, ha amenazado diciendo que una sentencia adversa al Estatuto será «una fábrica de soberanistas». Ridao está en su papel, pero lo mismo Montilla que Saura demuestran ser políticamente ágrafos, ignoran que a los políticos también les gobierna la Ley. Lo decían los primeros demócratas, la Ley es el rey de todos, de los mortales y de los inmortales. 
  
Estos políticos inciviles están quemando las naves, los vaixells, pero con el culo pegado al sillón. El primero que quemó las naves fue Alejandro, después le imitó Cortés. Alejandro, que sabía de memoria La Ilíada, dijo a sus soldados: «Mirad cómo arden los barcos, ésta es la razón de que debéis vencer, ya que de no hacerlo, no volveréis a vuestros hogares, el mar es el único camino de vuelta y sólo podréis regresar en los barcos de los enemigos». 
  
Montilla y sus consellers intentan regresar con las naves del enemigo, pero sin arriesgar ni siquiera el sueldo. Su actitud me recuerda lo que leí en Historia de Cataluña de Ferran Valls i Taberner: «No perdáis el tiempo luchando contra el Estado, apoderaos de él». 
  
En la historia de Cataluña hubo alzamientos, alborotos y revueltas. Intentaron la instauración de una república bajo la protección del rey de Francia. Quevedo, pluma del conde-duque, devorado por el odio a los catalanes, los retrata como desleales y ladrones, en su caos de privilegios. Aquellos peleaban, éstos no pierden el tiempo luchando contra el Estado, están introducidos en él, conspiran desde dentro, amparados por la Constitución, que apuñalan con vileza. 
  
Lo que pasa es que, con su juego de extorsiones y timos, están precipitando su historia y tal vez no era la independencia lo que querían. 
EL MUNDO. 24-11-2009 
  

viernes, 13 de noviembre de 2009

EL PARLAMENTO VASCO DEBATE LA CUSTODIA COMPARTIDA EL 18/11/09

    La Convención sobre los Derechos del Niño,ratificada por España obliga a los Estados a respetar el derecho  del niñ@ a mantener contacto y relaciones personales de forma regular,así como la obligación de los Estados a posibilitar el ejercicio de la responsabilidad que estos tiene en la educación,cuidado y crianza de l@s menores.

 

    La comisión Europea aprobó la carta del Derecho de Familia,recogiendo el derecho del menor a relacionarse con ambos progenitores después del divorcio.En aplicación de esta norma paises como Finlandia,Suecia,Dinamarca,Portugal,Bégica,Italia y Francia han recogido en su normativa la guarda y custodia compartida como norma preferente,han generalizado la mediación familiar y potenciando la liquidación inmediata de los gananciales.

 

    En el Estado Español los resultados de la aplicación de la ley del divorcio no esta cumpliendo los objetivos que se planteó y  se estan conculcando estos principios del derecho internacional.

 

    La contenciosidad ha  subido en España del 2004 al 2009 del 34,2 al 40,9 y en Euskadi del 32% al 36,25%,preveiendose una importante subida este año por la crisis económica.

 

    Mas de 50.000 menores se ven insertos en estos contenciosos,siendo utilizados y manipulados en mayor o menor medida,siendo víctimas de algun tipo de maltrato un número cercano a los 20.000.

 

    La guarda y custodia compartida solo representa en Euskadi un 8,6%,lo que implica que en torno al 90% de las custodias se dan a la madre,pudiendo estos perder la relación con sus padres y en cualquier caso facilitando que el hombre no se implique activamente en el cuidado y crianza de sus hij@.

 

    No obstante en Iparralde un número importante de residentes vascos se pueden acoger a  los beneficios de la legislación francesa.

 

    De otra parte la vivienda se adjudica con la custodia del menor con lo que se estan produciendo situaciones muy injustas y utilizaciones perversas de la ley.

 

    Conscientes de que esta situación debe ser modificada y que la guarda y custodia compartida es una demanda social mayoritaria,Cataluña,Valencia y Aragón han iniciado procedimientos para desarrollar su codigo de familia introduciendo la custodia compartida.

 

En Euskadi,la Federación de Euskadi de madres y padres separados propondra el día 18 a las 4 de la tarde,en la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento Vasco:

 

1º- Que el Parlamento Vasco, bien mediante la adopción de la "Iniciativa Legislativa ante Cortes Generales" o mediante otra decisión parlamentaria    promueva  la modificacion de la ley del divorcio, introduciendo en ella la custodia compartida, como norma preferente, la liquidación de bienes gananciales y la generalización de la mediación familiar intrajudicial obligatoria.

 

2º- Que el parlamento vasco  aborde las tareas legislativas necesarias, para que el derecho civil foral vasco contemple la custodia compartida como norma preferente, la liquidación de bienes gananciales y la generalización de la mediación familiar intrajudicial obligatoria, en los casos de separacion o divorcio, y sea de aplicación en todo el territorio de la Comunidad Autónoma del País Vasco.

 

martes, 3 de noviembre de 2009

La verdad sobre el caso del Alakrana

    Llevamos semanas a vueltas con el caso del atunero vasco Alakrana cuyo rescate, si Dios no lo remedia, tendremos que pagar entre todos los españoles. Creo que los secuestradores piden cerca de tres millones de euros. No está nada mal. Pero la pregunta del millón es ¿por qué tenemos que pagar ese pastón entre todos los españoles con nuestros impuestos y no el gobierno vasco con los impuestos de los vascos?

    Analicemos los hechos: 1º) Está demostrado que el atunero vasco secuestrado, con una tripulación a bordo de 36 personas, faenaba fuera de la zona de seguridad, por lo que alguien de «arriba» (no los marineros) tiene una gran parte de responsabilidad en lo sucedido. 2º) También está demostrado que el atunero vasco navegaba sin la bandera española, ondeando en su lugar la ikurriña o bandera del PNV, diseñada por Sabino Arana, que más tarde se convertiría en la bandera de la comunidad autónoma vasca.

[Aquí tienen la ikurriña ondeando en el Alakrana:http://www.pormi.net/noticias-semana/2009/fotos/secuestro-barco-espanol.jpg]

    Puesto que la bandera vasca no corresponde a ninguna nación, no tiene ningún tipo de validez, lo que convierte automáticamente al atunero en un barco pirata. O dicho con otras palabras, lo que sucedió en realidad fue que un barco pirata fue atacado por piratas somalíes. Y entre piratas debería quedar la cosa si no fuese porque sus 36 tripulantes, vascos, gallegos o inmigrantes, no tienen la culpa de lo sucedido.

    Esto, desde el punto de vista político y humanitario, complica las cosas, pues los marineros, incluidos los vascos, tienen derecho a ser protegidos y defendidos por el Estado español, pero sobre los verdaderos responsable de lo sucedido (el armador y en cualquier caso el capitán) debiera recaer una pena ejemplar por incumplir las normas de navegación, al navegar fuera de la zona de seguridad y, aún por encima, no llevar la bandera española como es obligado.

    Los marineros son unos mandados que se enrolaron en el atunero para ganarse la vida. Ellos no tienen la culpa del hecho de que numerosos buques vascos naveguen con la bandera española sólo hasta alcanzar aguas internacionales, momento en el cual alguien desde «arriba» (convendría investigar quién y por qué) da la orden de arriar la bandera española para izar en su lugar la bandera regional vasca.

    El caso más famoso de esta conducta ilegal ocurrió en abril de 2008, cuando el atunero Playa de Bakio navegaba también en aguas cercanas a Somalia y fue secuestrado por piratas de ese país. Igual que el Alakrana, el buque español navegaba como un buque pirata, por no llevar enarbolada la bandera de un país soberano, según establece la normativa internacional en vigor suscrita por España. En concreto, el artículo 92 del convenio internacional del Derecho del Mar, dice que todo buque «navegará bajo pabellón de un solo estado y quedará bajo la protección de dicho estado que deberá garantizar su seguridad en alta mar».

    Lo tragicómico del caso es que los propietarios de estas embarcaciones cuando son abordadas por delincuentes pretendan que sea el Estado español el que les dé protección e incluso pague el rescate exigido por los piratas.

    Estamos ante un caso de «secesionismo a la carta»: para lo que me conviene soy español y para lo que no, vasco. ¿Para qué pide un buque «vasco» protección a la Armada española y no al gobierno vasco? Esperemos que cuando el País Vasco sea libre y soberano, tenga un ejército lo suficientemente numeroso y bien armado como para proteger a todos sus buques que faenan en mares lejanos fuera de las zonas de seguridad.

——————————————————————————————

NOTA ACLARATORIA: En derecho marítimo internacional, cualquier navío pertenece al país cuya bandera enarbola. Puede suceder que un barco portugués lleve bandera griega. A todos los efectos, el barco es griego y estar sobre él es como estar en Grecia.

Todas las banderas nacionales están reconocidas. Los barcos sin bandera, no pueden navegar y su situación es ilegal, por lo tanto pueden considerarse apátridas o piratas y cualquier gobierno que considere que ocupan sus aguas o intereses pueden arrestarlo, requisarlo y someter a juicio y condenar a su tripulación.

También parece ser una práctica habitual que los atuneros vascos (de momento también españoles) siguiendo la filosofía del PNV y con el natural consentimiento de sus armadores, arríen la bandera española nada más salir de las 200 millas e icen solamente la ikurriña como pabellón «nacional». A efectos jurídicos marítimos, estos atuneros no pertenecen a ningún país pues la ikurriña no está reconocida como bandera de una nación soberana. Da lo mismo que enarbolen la ikurriña que los calzoncillos de Arzalluz. No les ampara el derecho marítimo internacional.

La ikurriña merece todos mis respetos, pero las infracciones deben pagarlas quienes las cometen y no acudir a Papá Estado cuando conviene y renegar de él para todo lo demás. Creo que ya está bien de «secesionismo a la carta». Señores armadores vascos, tengan un poco de dignidad, sean coherentes con sus ideas y tengan la amabilidad de no pasarnos a todos los españoles la factura de sus caprichitos secesionistas.

domingo, 1 de noviembre de 2009

La contenciosidad en los divorcios aumenta un 6% respecto a 2008

http://www.noticiasdegipuzkoa.com/2009/10/30/sociedad/euskadi/la-contenciosidad-en-los-divorcios-aumenta-un-6-respecto-a-2008

Agipase cita como causas la crisis económica y el mal uso de la ley de violencia de género, entre otras

DONOSTIA. La Asociación Guipuzcoana de Madres y Padres Divorciados (Agipase) advirtió ayer de que la contenciosidad en los procesos de divorcio durante el primer semestre de 2009 ha aumentado un 6% respecto al año anterior. La crisis económica, el "fracaso" de la Ley del Divorcio, "la utilización perversa" de la Ley de Violencia de Género y la "falta de recursos preventivos" son, en opinión de este colectivo, las "causas principales" de ese aumento.

Por ello, consideran "urgente" tomar medidas que reduzcan la contenciosidad, más aún cuando ocho de cada diez casos de violencia de género e intrafamiliar se dan en citaciones de separación o divorcios contenciosos.

Los responsables de Agipase enumeraron las actuaciones que han llevado a cabo desde la federación vasca para disminuir la contenciosidad de los procesos de divorcio, que durante el primer semestre del año han sido en Gipuzkoa 924, de los que el 36,5% se realizaron de forma contenciosa.

Así, Agipase tiene previsto presentar el 11 de noviembre ante el Parlamento Vasco una proposición no de ley para instar al Gobierno del Estado a que modifique la ley del divorcio. El objetivo es que se incluya la guardia y custodia compartida como norma, la liquidación inmediata del hogar conyugal y la "extensión de la mediación familiar a todos los partidos judiciales".

Otra parte de esa propuesta alude a la posibilidad de que se "explore" si en el desarrollo del Estatuto de Autonomía "se puede desarrollar en Euskadi un código civil de familia propio".

Entre las propuestas realizadas por Agipase también se contemplan ciertas medidas por parte de la Consejería de Justicia. Así, señalan que el Gobierno Vasco "establecerá acuerdos para que en los juzgados de familia se desarrolle la mediación intrajudicial coordinada con los servicios de mediación familiar". Además, según señala Agipase, Lakua impulsará la creación de juzgados de familia y equipos psicosociales en municipios de más de 25.000 habitantes, los cuales se regularán reconociendo "sus funciones, formación de su plantilla en familia, etcétera". Estos equipos deberían estar presentes, en opinión de Agipase, en los juzgados de violencia de género.

fondo de garantía social Por otro lado, el colectivo toca otros ámbitos en sus reivindicaciones como la creación de un cupo específico de viviendas de alquiler social para divorciados, así como la puesta en marcha del fondo de garantía social para situaciones de impago de pensiones que, según denunciaron, "el nuevo gobierno pretende retrasar sin fecha aduciendo falta de presupuesto". Agipase tendrá hoy y mañana disponible una carpa de sensibilización delante del Koldo Mitxelena de Donostia, con información y entretenimiento.